domingo, 12 de junio de 2011

La armonía del desencuentro










La armonía del desencuentro




“Tratas de no saber y sabes
que ya está todo maniatado...”
J. C. Bonald




Amanecía y era verano.

Caminamos muchas calles
hablando
dibujando las suelas con forma de empedrado
hablando
espiando la historia secreta de lentos adoquines
hablando
esquivando ruinas breves de veredas rotas
hablando.

Un linyera
amigo
te saludó en una esquina.

Me acordé de pronto
que en algún momento
debía volver a mi casa
donde había dejado un mundo
un mundo enorme que trataba de meter en vano dentro de mi valija
sin mucha suerte
ni muchas ganas.

Yo me iba.
Vos te quedabas.

Seguimos hablando
y caminando.

Seguimos caminando
y hablando.

Seguimos.
Te seguí.
Me seguiste.
Nos seguimos siguiendo hasta que olvidé
                                                             la noche
                                                                        el amanecer
                                                             la luna
                                                                        mañana.

Tu tibieza viajaba
suave
sin boleto picado ni pasaporte al día
hasta alcanzar el borde de mi risa
y nos perdimos
por entre el aire anaranjado
de aquel pedazo de ciudad casi vacía.

Yo llevaba un anillo en el dedo.
Vos un bozal en las venas.

Volví a mi casa
y mis valijas.
Vos a la tuya
y tus vacíos.

Para pésima combinación fue un óptimo desencuentro.



Gabi Romano
Este poema es parte de "Work in progress..."

__________________________________________

No hay comentarios:

Publicar un comentario